El EPP: la elección de Olivo para una solución ecológica y circular

El polipropileno expandido es un termoplástico cuyos polímeros se suavizan cuando se calienta y se endurecen al contacto con frio. Como mono material 100% reciclable, el polipropileno expandido contiene ningunos compuestos orgánicos volátiles, metales pesados o sustancias nocivas para la capa de ozono. Además, genera ningún residuo y contribuye a reducir las emisiones de carbono.
Así, la BOX resulta de la aglomeración de las bolas de EPP por el vapor de agua. La eco-responsabilidad de este material se refuerza por sus características técnicas : resistente y estable, con una memoria de forma que le permite deformarse sin romper y mantener su estructura inicial. De esta manera, los productos de EPP tienen una duración reforzada y representan para sus usuarios un real soporte logísticos.

Desde la antigüedad, Anaxágoras de Clazomene hacía ya la apología de la preservación y de la transformación de la materia diciendo que « nada se crea o se pierde, pero cosas que existen se combinan y después se separan de nuevo ».

Materia 100% reciclable, nuestro EPP se integra en una cadena de reutilización. La estrategia de gestión de residuos que adapta Olivo contribuye así a la valorización de una economía circular.
Existen varios tipos de reciclaje: la molturación – el reciclaje químico (despolimerización) – el reciclaje verde
Al cabo de 3 a 4 ciclos de reciclaje, la bola de EPP, compactada, se fragiliza y se deteriora más fácilmente. De hecho, la compactación sucesiva provoca una pérdida progresiva de las propiedades mecánicas. Así, existen 2 opciones para integrar de nuevo las BOX dentro una cadena de producción:

• Opción 1 – Se añaden a un material virgen en mas gran densidad;
• Opción 2 – se ponen en reciclaje químico por despolimerización (baño de aceite que separa las moléculas) para creer de nuevos monómeros para después asociarlos de nuevo;